¡23 de septiembre de 2005! Día y noche inolvidables. Eran más de las 4:00 y acabábamos de almorzar en El Gran Café luego de salir de Lares.
iliana Laboy
Enviado por Manuel E. Meléndez Lavandero
¡23 de septiembre de 2005! Día y noche inolvidables. Eran más de las 4:00 y acabábamos de almorzar en El Gran Café luego de salir de Lares. Estábamos por comenzar el regreso a San Juan, cuando escuchamos a Penchi dar la noticia de que el FBI había rodeado la casa de Filiberto en Hormigueros. Nuestra primera reacción fue salir para Hormigueros, pero con nosotros estaban dos camaradas dominicanos que habían venido a la conmemoración del Grito de Lares y temimos por su seguridad si nos acercábamos al área rodeada por federales. Seguimos hacia San Juan y los llevamos al hotel en el que se hospedaban. Nosotros seguimos hasta el Hiram Bithorn donde ya había una multitud.
Estuvimos hasta entrada la madrugada frente al tribunal federal. La indignación era evidente en los rostros de aquellos miles de personas, muchas de las cuales no eran independentistas. .Había gente de todas las edades, ricos y pobres, y de distintas persuasiones religiosas, así como ateos. Todas esas personas gritaban lo mismo:¡FBI ASESINO! Allí nos encontramos con la familia mía y la de Norberto. Esa noche se hizo claro que este pueblo no es cobarde y sabe responder al tirano. La dictadura estadounidense lo sabe y nos teme. Por eso asesinaron a Filiberto cuya voz se escuchaba cada vez con mayor atención y aceptación. Pero, el pensamiento de Filiberto nos acompañará hasta la victoria y siempre gritaremos, ¡Toda boricua machetera! ¡Todo boricua Machetero! ¡Filiberto Ojeda Ríos, PRESENTE!