En el proceso histórico del desarrollo de Puerto Rico, dominado por el colonialismo en todas sus manifestaciones, se inserta la intervención del sindicalismo norteamericano en Puerto Rico. Reproducimos dos notas relacionadas con estas manifestaciones del colonialismo sindical.

Buenos días. Entre el 2 al 6 de agosto de 2023 se llevó a cabo en el Hotel Caribe Hilton la Vigésima cuarta Convención del Consejo Laboral para el Avance de América Latina, LCLAA. Esta es una organización respaldada por los principales sindicatos norteamericanos que han desarrollado en Puerto Rico, desde 1898, desde el minuto uno de la invasión, una política conocida como colonialismo sindical.
Desde ese momento el sindicalismo puertorriqueño se ha debatido entre una visión clasista, ideológicamente identificada con movimientos políticos de izquierda, internacionalista y solidaria frente a otra visión economicista, en armonía con los patronos y empresas, que no reconocen la lucha política de la clase trabajadora. En cambio, esta visión economicista, mientras niega la lucha política de la clase trabajadora, promueve los arreglos y entendidos entre gobernantes y las élites sindicales del norte.
En el proceso histórico del desarrollo de Puerto Rico, dominado por el colonialismo en todas sus manifestaciones, se inserta la intervención del sindicalismo norteamericano en Puerto Rico. Reproducimos dos notas relacionadas con estas manifestaciones del colonialismo sindical. La primera recoge declaraciones de la Sra. Randi Weingarten, presidenta de la American Federation of Teachers, AFL-CIO, quien desde esta convención anuncia que incluirán “escuelas de Puerto Rico para ser parte de una iniciativa, que se extenderá por un año, para ofrecer soluciones que atiendan la pérdida de aprendizaje, la alfabetización y la soledad que enfrentan los estudiantes en jurisdicciones de Estados Unidos.” Como colonia, somos parte de esas jurisdicciones y la presidenta del sindicato norteamericano dispone de ello. Su filial en Puerto Rico, la Asociación de Maestros, colaborará en el proceso.
A continuación, también reproducimos el análisis que hacen los representantes de la LCLAA sobre por qué deben organizarse los latinos migrantes en sindicatos en Estados Unidos. Presentan una posibilidad, un escenario, que no vemos en Puerto Rico. ¿Seremos latinos migrantes para ellos o que seremos?
Celebran su convención en el Caribe Hilton y no encontramos noticias o declaraciones sobre el resultado de esta convención en cuanto a la realidad de Puerto Rico. En sus páginas en la red existe un informe del 2020 donde se reclaman ayudas federales ante los huracanes, el Covid 19 y la deuda desde la perspectiva imperial. Solo se establece que Puerto Rico es un territorio que el Congreso debe atender. Nada aparece sobre el Puerto Rico del 2023.
Estas organizaciones promueven la privatización de las agencias públicas en Puerto Rico. Propician la llegada de fondos federales para seguir expandiendo sus influencias, entre ellas, la creación de ONG ‘s para administrarlos. Son una extensión de la política del Partido Demócrata mediante sindicatos que aportan grandes sumas de dinero a candidatos a puestos electivos. No se opusieron a la aprobación de la Ley Promesa, al contrario, negociaron beneficios con la Junta de Control Fiscal a cambio de reconocer su implantación en Puerto Rico.
Nada, que el colonialismo sindical es un brazo más de dominación que el imperio ha utilizado desde el 1898 para acá.
Luis Pedraza Leduc
Enfocarán necesidades sociales de estudiantes
La Federación Americana de Maestros anunció que financiará proyectos y estrategias en escuelas públicas en jurisdicciones de Estados Unidos, incluido Puerto Rico
- El Nuevo Día
- 6 Aug 2023
- KEILA LÓPEZ ALICEA keila.lopez@gfrmedia.com Twitter: @keylaliz
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o“Hay mucha soledad, hay mucha pérdida de aprendizaje. Hay muchos niños que se sienten muy desconectados de todo”, expresó Randi Weingarten, presidenta de la Federación Americana de Maestros.
Las escuelas de Puerto Rico serán parte de una iniciativa, que se extenderá por un año, para ofrecer soluciones que atiendan la pérdida de aprendizaje, la alfabetización y la soledad que enfrentan los estudiantes en jurisdicciones de Estados Unidos, informó la presidenta de la Federación Americana de Maestros (AFT, por sus siglas en inglés), Randi Weingarten. El programa, llamado “Soluciones reales para niños y comunidades”, inyectará $5 millones para respaldar proyectos exitosos y fomentar que se repliquen, así como desarrollar campañas de orientación y alianzas. “Hay mucha soledad, hay mucha pérdida de aprendizaje. Hay muchos niños que se sienten muy desconectados de todo, que no quieren estar en la escuela por el tiempo que pasaron fuera debido a la pandemia (de COVID-19), o que no tienen el tipo de relaciones sociales o de comunidad que tenían, que no tienen actividades extracurriculares”, expresó Weingarten, en entrevista telefónica.
“Así que dijimos, ‘¿qué podemos hacer?’. Decidimos tener una campaña de un año para enfocarnos en estrategias reales. Así que, por ejemplo, (habrá campañas para que) las compañías de redes sociales tengan como prioridad la seguridad de los niños. Estamos trabajando en una página de internet nueva, con una emisora pública de televisión, para tener consejos reales para maestros y padres, sin importar el currículo, con consejos que valgan la pena usar, como qué hacer si tienes un niño con problemas de lectura”, agregó.
En la isla, la AFT trabajará con la Asociación de Maestros –que son entidades aliadas. “Ya estamos mirando cómo podemos trabajarlo”, dijo Weingarten. “Si hay un lugar donde los estudiantes han sufrido PTSD (síndrome de estrés postraumático) por los desastres naturales, por la quiebra (del gobierno), por los terremotos, es Puerto Rico. Y nosotros queremos ayudar a los estudiantes, esa es nuestra misión”, expresó.
La líder sindical estuvo en la isla para participar de la convención del Consejo Sindical para el Avance del Trabajador Latinoamericano (LCLAA, por sus siglas en inglés), evento en el cual hizo énfasis en la necesidad de distanciar los esfuerzos para atender la educación de las “guerras culturales” que se viven en Estados Unidos. “No se trata de prohibir libros, nosotros queremos darles libros a los niños”, argumentó.
Weingarten destacó que, más allá de las necesidades académicas de los estudiantes en Puerto Rico, una de las prioridades a nivel local debe ser mejorar la infraestructura de las escuelas públicas. La líder sindical visitó la isla varias veces tras el paso de los huracanes Irma y María, en 2017, y deploró que aún existan planteles que están en malas condiciones a raíz de estos ciclones y los terremotos de 2020.
Lamentó que, como señaló recientemente el Departamento de Educación federal, el gobierno local no ha tenido un progreso sustancial en el uso de fondos federales asignados para el manejo de la pandemia. “Obviamente, estamos un poco decepcionados que este trabajo no se ha realizado… cosas como los edificios todavía se están cayendo y necesitan ser arreglados. Nuestros niños necesitan escuelas bien ventiladas y no que se estén desbaratando, que tengan electricidad, que tengan buenos libros y materiales, escuelas que tengan maestros. Con la escasez de maestros en Estados Unidos, este no debe ser el lugar para reclutar maestros para Texas, Nueva York o Florida. Necesitamos tener las condiciones aquí para que los maestros quieran enseñar aquí, que se quieran quedar en la isla y que puedan hacerlo”, argumentó.
“Esas son cosas que se logran no cambiando secretarios, sino haciendo que la educación, que las escuelas, sean una prioridad para el gobierno. Se habla mucho, pero tiene que ser una prioridad de verdad”, insistió.
Cómo piensa la nueva generación de sindicalistas latinos que gana protagonismo en Estados Unidos
LPO entrevistó a mujeres y hombres que son nuevos líderes sindicales. Por qué afirman que se vive un cambio histórico y tienen la voz que sus padres no tuvieron.
AP

By Natalia López (Washington)07/07/2023
El crecimiento de la población latina en la fuerza laboral de Estados Unidos es cada vez más marcado y se ve representado en la participación dentro de la actividad sindical estadounidense. Según el Instituto de Política Migratoria (MPI), cerca de 11 millones de inmigrantes indocumentados viven en los Estados Unidos y el 67% provienen de países latinoamericanos. Son 6,9 millones de personas que estarían implicadas en la fuerza laboral, pero de manera informal ya que no tienen estatus migratorio.
En ese contexto, los trabajadores latinos están encontrando su voz con el resurgimiento de la sindicalización en Estados Unidos. Los movimientos de lucha por derechos laborales se intensificaron y también su impacto en el mercado laboral.
Hoy, un 9,1% de los hombres y un 8,5 % de las mujeres están sindicalizados. Muchos inspirados en los movimientos políticos de sus propios países. Para los líderes sindicales latinos las desigualdades y los abusos son el principal motor de una lucha que no para de crecer.
“En un tiempo no había voz, pero ahora la mayoría de los que protestan son latinos”
“Muchos de trabajadores latinos se involucraron en el mundo sindical después de la pandemia. Es un movimiento general de los trabajadores en Estados Unidos, de reconocer o poder hablar más sobre sus derechos y sus necesidades. El sindicalismo aparece como un espacio para colaborar mutuamente”, reflexiona Yanira Merino, presidente del Consejo Laboral para el Avance de América Latina (Labor Council for Latin American Advancement, LCLAA).
El LCLAA es la organización nacional más importante dedicada a la defensa y representación para los trabajadores latinos en Estados Unidos. Nació hace más de 40 años con el objetivo de proteger y empoderar a los trabajadores y promueve la sindicalización como clave para una mejor calidad de vida.
A nivel federal existen leyes -como la Ley de Protección del Derecho a Organizarse (PRO)- que fueron creadas para fortalecer los derechos laborales y promover una mayor equidad en el ámbito del trabajo. Esta legislación representa un hito importante en la defensa de los derechos de los trabajadores porque, entre otras cosas, restaura su libertad para formar sindicatos y participar en negociaciones laborales de manera justa.
“Hoy, con un 30% de trabajadores interesados se pueden presentar un sindicato particular dentro de una empresa. Si se logra esa representación, el gobierno federal le informa a la compañía que esos trabajadores están interesados en organizarse y ahí solo queda que las partes se pongan de acuerdo”, cuenta el organizador sindical Alejandro Ulises Miranda.
Según el Censo 2020, los latinos representan el 18.7% de la población total y el 17,3 % de la fuerza laboral del país. En este contexto resulta esencial garantizar que los trabajadores hispanos tengan acceso a sus derechos laborales y puedan organizarse para mejorar sus condiciones de trabajo.
“Conocer cómo organizarse es clave para mejorar su situación. El problema actual de muchos trabajadores es que no tienen papeles y eso influye a la hora de reclamar derechos o pedir ayuda. Algunos terminan siendo explotados y abusados de diferentes maneras”, afirma Merino.
Las diferencias se ven reflejadas en los salarios. La mujer latina es una de las minorías más afectadas. Las últimas estadísticas marcan que por cada dólar que gana un hombre blanco no hispano, ellas ganan 57 centavos por realizar el mismo trabajo.
“Cada lucha que se gana es porque nuestra gente está cansada de la opresión. Nos cansamos de los abusos y de los maltrato”, dice Alejandro Ulises Miranda. “Hay personas que no han recibido aumento en los últimos cinco o diez años. Pero se están haciendo cosas, el Presidente (Barack) Obama cambió algunas leyes. Antes se tardaban de tres a seis meses para dar fecha en la junta federal. Hoy en 21 días ya puedes conseguir una fecha para una para una posible elección sindical¨, destaca.
Los jóvenes entienden más el hecho de tener una voz y luchar por los derechos. Muchos de sus padres no la tenían y están haciendo lo que ellos nunca pudieron en este país. Estamos entrando en una nueva era.
En momentos de tanta complejidad, la provisión de información sobre derechos laborales es uno de los pilares del trabajo de los sindicatos. Para muchos trabajadores, la organización sindical ofrece conocimiento para negociar con sus empleadores sobre salarios, horas de trabajo y otras condiciones laborales. También la posibilidad de unirse, colaborar, negociar colectivamente a través de representantes elegidos, discutir salarios y beneficios.
LPO
Sonia Vásquez Luna es la primera mujer latina inmigrante elegida Gerente Comercial para la Unión Internacional de Trabajadores de América del Norte (LIUNA) y cree que las nuevas generaciones tienen un papel fundamental en este movimiento: “Los jóvenes entienden más el hecho de tener una voz y luchar por los derechos. Muchos de sus padres no la tenían y están haciendo lo que ellos nunca pudieron en este país. Estamos entrando en una nueva era. Siento que es el resultado de todo lo que nos ha pasado. Por eso desde los sindicatos tenemos que enseñarles a abrir los espacios”, afirma.
“En Estados Unidos, hay un nuevo movimiento sindical liderado por latinos y afroamericanos”
Para la presidenta del área metropolitana del Consejo Laboral para el Adelanto Latinoamericano (LCLAA), Jessica Tamayo, el liderazgo de las mujeres es fundamental porque necesitan conocer sus derechos más fundamentales. “El trabajo de las organizaciones es clave porque las personas no saben cuáles son los derechos. Muchas veces los latinos llegamos a este país y no hablamos el idioma. Agarramos el primer trabajo que conseguimos. Se viven muchas injusticias como abusos sexuales y acoso laboral”, dice.
El trabajo de las organizaciones es clave porque las personas no saben cuáles son los derechos. Muchas veces los latinos llegamos a este país y no hablamos el idioma. Agarramos el primer trabajo que conseguimos.
En el caso de las mujeres, Tamayo afirma que muchas tienen miedo de reportar las irregularidades por no tener documentos. “A veces las mujeres embarazadas no van a los controles prenatales o en las áreas de limpieza las obligan a usar químicos, o les impiden ir al baño. Nuestra misión es ir a la comunidad, hablar en las escuelas, ir a las iglesias a informarles que no tienen que tener miedo. Creemos que la sindicalización es el mejor camino porque consiguen beneficios como seguro médico o un pago más equitativo”.
Los trabajadores cada vez están más informados y eso permite que puedan organizarse o encontrar espacios que los presenten. El movimiento laboral creció y, entre las nuevas generaciones, se destaca como nunca la representación latina.