Buenos días. Luego de negociar el convenio por cerca de tres años y desarrollar múltiples acciones concertadas incluyendo paros de labores y una huelga de seis semanas de duración, la Union Independiente de Trabajadores de Servicios Legales, UITSL, logró la firma del convenio colectivo, el cual fue ratificado por la matrícula en asamblea el 31 de marzo de 2022. Mientras la matricula pensaba que la firma del convenio significaba una tregua en sus luchas, el patrono no descansó e inició un proceso de violación del convenio mediante tácticas de reinterpretar lo negociado.
Ello ocasionó la radicación de seis casos ante arbitraje en el año 2022. El 1ro de noviembre de 2022 el patrono cambia unilateralmente el artículo de acumulación de licencias de vacaciones para reducir a 18 días la acumulación de vacaciones el cual estaba acordado en 30 días. Ello provoca la radicación por parte de la Union de dos cargos de práctica ilícita contra el patrono.
Lo que está en juego en estos momentos es si luego de firmar un convenio el patrono puede cambiar a su antojo lo acordado. De prevalecer esta posición, entonces cada patrono luego de negociar podrá imponer sus condiciones por encima de lo negociado. Esta inusual práctica la lleva a cabo unos abogados que viven de los procesos de litigar y litigar todo mientras se hacen ricos a cambio de negarles derechos a los trabajadores.
Es importante que todo el movimiento sindical cierre filas con la UITSL y vele por el reconocimiento de sus convenios y acuerdos.
Luis Pedraza Leduc
