Revolución: ¡no hay opción!
La Nueva Pensamiento Critico no tiene otra causa mayor que contribuir a agrupar las vanguardias para organizar la revolución a través de un partido revolucionario capaz de tomar el poder y dirigir el país.
La revolución no la convocan fraternidades ni sororidades con cervezas en la mano. Es un proceso muy serio que requiere organización y cronometría de las acciones concertadas a diversos niveles, que solo un partido revolucionario dirigido por cuadros experimentados es capaz de llevar adelante de forma escalonada. La acción espontánea de las masas, indignadas por la situación prevaleciente, puede o no conducir a una revolución. Por su carácter social, la revolución requiere de la presencia hegemónica de dichas masas, pero también es necesaria una dirección certera y una ideología comprobada históricamente.
Es misión central de la Nueva Pensamiento Crítico encaminarnos hacia esos objetivos.