Nuevos datos revelan que más de 60,000 familias interesan alquilar o comprar una residencia en la isla, lo que para el economista Graham Castillo representa un reto y una oportunidad

Por Sharon Minelli Pérez El Nuevo Día
Los datos censales y económicos apuntan a que en Puerto Rico “se está acumulando una necesidad de vivienda” de 60,000 a 90,000 unidades, principalmente para jóvenes y trabajadores que se ven impedidos de establecer su hogar porque no consiguen dónde alquilar o comprar, afirmó el economista Graham Castillo.
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“La asequibilidad es un tema real en Puerto Rico y los datos del Censo así lo reflejan. Cuando una persona paga demasiado por su vivienda, sacrifica educación, alimentos y salud”, advirtió el presidente de la firma Estudios Técnicos, al presentar el estado del mercado de vivienda durante la Convención de la Asociación de Constructores de Puerto Rico (ACPR), que comenzó ayer en el Centro de Convenciones de Miramar.
Además, Castillo alertó que esta tendencia es nociva para el interés público de retener jóvenes y personas en edad productiva en una sociedad envejecida, donde ya 43% de la población tiene 50 años o más.

“Nuestros trabajadores no están consiguiendo vivienda asequible, se siguen viendo aumentos en rentas en centros urbanos. Isla Verde se fue por las nubes y hace tres años no estaba en esos niveles. Tenemos un reto importante ante nosotros”, abundó.
A su vez, Castillo reconoció que “hoy la industria no puede suplir el segmento de $150,000 o menos” con unidades nuevas debido a los altos costos de construcción. Pero cerca del 65%, es decir -casi siete de cada 10 transacciones- de las compraventas de viviendas son por debajo de esa suma.
Castillo explicó que ello implica que un segmento importante del mercado tiene los ojos en viviendas existentes que, por esa alta demanda, también suben de precio.
“Y las ejecuciones (de hipoteca) se mantienen estables, así que no van a ser una fuente de acceso a vivienda asequible”, agregó.
Por su parte, Vanessa de Mari, presidenta de la ACPR, recordó que la Legislatura tiene ante sí la llave para que los desarrolladores puedan volver a construir unidades asequibles. Se trata del proyecto de la Cámara 1470, que elevaría los topes de precio de la vivienda asequible a un rango que fluctúa entre $210,000 y $250,000.
En marzo pasado, el Senado derrotó la medida, pues tenía dudas acerca de si los precios que se considerarían asequibles con la legislación, en efecto lo son.
Pero Agustín Rojo, presidente electo de la ACPR, aseguró que han hecho el análisis a raíz de los aumentos en el salario mínimo y en las tasas de interés y han concluido que “las familias de dos ingresos con un salario mínimo podrían adquirir viviendas con precio de $170,000″. Mientras, domicilios con ingresos medianos, pero que van por encima del mínimo, cualificarían para el rango de precios propuesto en la legislación.
“Tenemos que cambiar un poco la visión de una casa asequible en Puerto Rico. Tenemos la suerte de que los ingresos, los salarios también han acompañado (el alza en costos)”, expresó Rojo.
Rojo, quien lidera la operación de la desarrolladora VRM Companies en República Dominicana, indicó que en la vecina república no han tenido el problema de que las empresas no puedan construir unidades de interés social porque los topes de precio se revisan para corresponder con el alza en costos, materiales y mano de obra.
“Cuando empezamos en Dominicana hace 10 años, han aumentado los topes 11 veces desde entonces. No es para que menos personas puedan cualificar. Todo lo contrario. Es una realidad económica de que aumentan los costos y los ingresos. Para permitir que ese grupo trabajador lo puedas atender con la ley (de vivienda asequible), se actualizan los topes de una manera proactiva”, expuso.
Desde 1976, VRM Companies ha construido miles de unidades de vivienda desde interés social hasta de lujo en Puerto Rico, Dominicana y Estados Unidos.
“Es muy importante lograrlo en Puerto Rico, para poder construir la vivienda que hace falta y traer a Puerto Rico, los jóvenes y trabajadores que nos hacen falta”, finalizó el presidente electo de la ACPR.
Además del tema de la vivienda asequible, la jornada contó con un panel de líderes de la industria financiera, en el que participaron Aurelio Alemán, de FirstBank; Ignacio Álvarez, de Popular; Maritza Badía, de Banesco USA; y James Connor, de Acrecent Financial.
A su vez, Rafael Lama, director de GFR Media, presentó el movimiento Junte Boricua ante la matrícula de la ACPR, una de las organizaciones que se han sumado al proyecto de enlace con la diáspora puertorriqueña que arranca en el 2024.
La Convención de la ACPR continúa este miércoles con enfoques en política pública y la industria hotelera.