Tuvo una participación muy especial el compañero Ismael Guadalupe, desde Vieques

El pasado sábado 11 de febrero se realizó en el espacio La Torre de la Librería Mágica el primer encuentro de la Nueva Pensamiento Crítico, coincidiendo con el primer aniversario del proyecto, que incluye un diario digital y una revista mensual de analisis y discusión. El director, Ángel M. Agosto, destacó que el órgano no pretende ser solo fuente de información diaria nacional e internacional, e instrumento de análisis al interior de la izquierda. Subrayó que una finalidad de la Nueva Pensamiento Crítico, articulada desde sus orígenes en 1978, es ser instrumento organizativo para impulsar la reunificación de los cuadros revolucionarios dispersos que se han formado a lo largo de décadas con las nuevas mentes revolucionarias del presente.
En el evento se escuchó un mensaje especial de Ismael Guadalupe desde Vieques, en el que expuso la problemática de la sla Nena en el presente y cómo se está tratanto de sustituir la población de allí por invasores extranjeros. El compañero Benjamín Vázquez, quien estuvo acompañado del compañero Benjamín Torres (ambos del equipo original de Pensamiento Crítico) expuso en torno a los orígenes de la revista fundada en febrero de 1978. Se recibieron mensajes de Radamés Acosta y se leyó una ponencia enviada por Manuel Meléndez Lavandero, quien fuera director de la revista en la década del noventa. Los compañeros Federico Cintrón Fiallo y Luis Pedraza Leduc hablaron sobre el papel del proyecto Nueva Pensamiento Crítico en la realidad actual.
Se reproducen a continuación las expresiones de Manuel Meléndez Lavandero, Federico Cintrón Fiallo y Luis Pedraza Leduc:
Presentación de Manuel E. Meléndez Lavandero

Agradezco al compañero Ángel Agosto por la invitación a compartir algunas reflexiones sobre mi experiencia con la Revista Pensamiento Crítico, donde tuve el privilegio de ser su director-administrador en el periodo 1992-95. La propuesta inicial de Ángel es que cubriera el periodo de las décadas 80-90, algo para lo cual entiendo hay personas con mejor entendimiento y conocimiento de ese proceso.
En el tercer trimestre del año 1991, el compañero Jorge Farinacci me invita a que viniera a Puerto Rico para reunirnos. Para esa época me encontraba trabajando como organizador comunitario en la ciudad de Chicago y era coordinador del Comité Anti Represivo 30 de agosto, que, como su nombre sugiere, enfocaba en el apoyo a compañeros(as) arrestados el 30 de agosto de 1985 acusados(as) por la expropiación de 7 millones de dólares, efectuada por los(as) Macheteros(as) a la Wells Fargo en Hartford Connecticut.
Pensaba en ese momento que Fari quería conversar sobre las tareas políticas vinculadas al caso. Un poco era eso y algo más. El compañero esboza una propuesta diciendo más o menos así: Mira, Hilton (Hilton Fernández Diamante) y yo vamos a ir presos y necesitamos a alguien que se quede al frente de la Revista en lo que nosotros estamos fuera. Para mí fue un gran honor y reto. Pero fue además una gran oportunidad, una puerta abierta para regresar a la Patria luego de haber estado fuera por espacio de seis años. Así que, sin pensarlo mucho, mi respuesta fue en la afirmativa.
Sabemos que la revista Pensamiento Crítico fue un referente político para toda una generación de militantes en la década de los 80 y 90 del siglo pasado. Cumplía una función leninista de educación política, de discusión y elaboración de línea teórica y organizativa para el movimiento revolucionario militante. Se elaboraban conversaciones y planteamientos sobre temas cardinales como la organización política de la clase obrera, el sindicalismo clasista, concepciones sobre la lucha armada, la organización del partido de clase y de combate. También se llegaron a elaborar importantes contribuciones en cuanto a temas de luchas sociales como la lucha ambiental, contra la militarización, feminismo y derechos de la mujer, solidaridad internacional. La revista fue, además, un espacio de convergencias para la izquierda puertorriqueña.
Los arrestos del 30 de agosto de 1985, contra los Macheteros(as), impactaron fuertemente a toda la izquierda del país. La revista Pensamiento Crítico, sufrió directamente esa embestida represiva cuando las oficinas de Taller Alborada, desde donde se elaboraba, imprimía y circulaba la revista fueron allanadas por el FBI. Miembros de su junta directiva fueron arrestados, otros pasaron al clandestinaje, provocando un disloque total a un proceso ascendente de lucha política. Conozco poco sobre el proceso de recomposición de la revista después del azote represivo. Lo cierto es que siguió circulando, a pesar del tropiezo.
A finales del 1991, comienzo a asistir a las reuniones de la junta editorial de la revista, la cual estaba compuesta y espero que la memoria no me falle, por compañeros como, Neftalí Garcia, Francisco Moscoso, Carmen Muñoz, Pablo Segarra, Feliz Córdoba, Genoveva Valentín, Hilton Fernández y Jorge Farinacci. Con ese equipo, el cual considero era un tanque de pensamiento político revolucionario, las reuniones bisemanales eran una delicia. Allí se discutía la situación política del país, de la universidad, las luchas ambientales, sindicales, estudiantiles, feminismos, de deportes, etc.
La revista tenía una circulación de unos 2,000 ejemplares que se enviaban por correo y una cantidad un poco mayor de 500 que se llevaba a establecimientos y circulación de persona a persona, lo que garantizaba su continuidad.
Es importante apuntar que la revista tuvo un subsidio indirecto del PRTP, el cual, habiendo hecho un acuerdo de colaboración con la Impresora Nacional, pudo asegurar que los costos de impresión de la revista fueran cero. El trabajo de arte y diseño seguía estando en manos del compañero Eduardo Colon quien mantenía su compromiso histórico con Pensamiento Crítico. También se fueron incorporando otras personas voluntarias a apoyar el diseño gráfico. Gran parte de los costos de operación se cubrieron, durante esa época, del producto de la venta de equipos y máquinas de imprenta de lo que fuera Talleres Alborada.
Traigo este tema porque es importante que tengamos conciencia que la operación de mantener una publicación, con el alcance que llegó a tener la revista, cuesta un montón de dinero. El mismo espacio del local en la calle Añasco, en el Barrio Blondet de Rio Piedras, era una aportación de Feliz Córdoba.
El compañero Ángel Agosto, como director fundador de Pensamiento Crítico debe conocer por experiencia propia lo costoso que resulta ser un proyecto como este. Por ello le felicito una vez más, por su persistencia, por el esfuerzo político de juntarnos y por la aportación económica que hacen él y la Casa Editora para garantizar que Nueva Pensamiento Crítico se encuentre nuevamente en circulación. Claro que no podemos dejarlo solo y parte fundamental de estas conversaciones debe incluir el tema de la financiación.
Me parece importante también plantear que, además de las enjundiosas conversaciones y debates políticos, que se daban en la revista, allí se incubaron algunos proyectos políticos noveles. Baste mencionar el que resultó ser el germen de la candidatura independiente de Neftalí Garcia al Senado en el 1992. Las consideraciones preliminares, la pertinencia de lanzar esa candidatura y la visión de generar a través de ella un Movimiento Amplio de Pueblo, se generaron desde la junta de directores de Pensamiento Crítico. Luego se ampliaron las consultas y se puso a la disposición de un grupo coordinador que le dio forma y vida al proyecto, alrededor del cual se aglutinaron personas representantes del sector sindical, ambiental, feminista, estudiantil y políticos, como el Taller de Formación Política, entre otros. Si fue políticamente correcto o no, ya eso es harina de otro costal y dependerá desde la óptica político-ideológica desde la cual se mire y analice.
Mirando al presente y al futuro, pienso que Nueva Pensamiento Critico tiene pertinencia como órgano que contribuya a analizar la realidad política, calibrar el contexto del colapso del modelo colonial-capitalista y aportar desde la experiencia y conocimiento político acumulado de los cuadros que se nuclean alrededor del proyecto, a trazar rutas de acción para la lucha de masas y el combate clasista.
Hay que tomar en cuenta que operamos en el mundo digital y existen muchas publicaciones allá afuera. Debemos considerar a los sectores a los cuales nos dirigimos y cómo hacerlo, de tal manera que sea atractivo visualmente, a la vez que estimule la lectura ponderada y el análisis. Que los artículos y escritos de NPC se puedan compartir en redes sociales sin mucha complicación, también, me parece importante.
Consideremos utilizar las plataformas virtuales para generar un espacio, digamos mensual, de entrevistas-conversatorios sobre temas sustanciales, nacionales e internacionales, por ejemplo. Algo así como: Nueva Pensamiento Crítico – La Entrevista.
Sea cual sea la decisión resultante del encuentro del sábado 11 de febrero, me comprometo a continuar colaborando con Nueva Pensamiento Crítico. Pido, sin embargo, me excusen que no pueda llegar a la cita. Asuntos apremiantes con la familia, me lo impiden. Un abrazo solidario para todas y todos,
Manuel E Melendez Lavandero
Presentación de Federico Cintrón Fiallo

Buenas tardes compañeros todas, todos y todes.
Gracias por la invitación a dirigirme a los presentes y a quienes hacen posible que la Nueva Pensamiento Crítico, en un momento tan crítico para la izquierda en Puerto Rico, haya visto la luz. Deseo destacar el trabajo manual, la participación obrera en la producción, sea esta remunerada o voluntaria. El intelectual orgánico, atado a la clase obrera y las luchas sociales, incluso los escritores de ficción, no podrían publicar sin que lo hagan posible los hijos e hijas de la clase obrera. Usualmente pasamos inadvertido que una publicación no es solamente el esfuerzo de los escritores, sino que, entregado el artículo o borrador del libro, quienes hacen posible su lectura es un conjunto de trabajadores, muchas veces anónimos. Sé que no podré nombrar a todos, todas y todes porque desconozco quienes hacen ciertos trabajos, pero les felicito por su importante labor para la lucha de los trabajadores, la independencia de Puerto Rico y el socialismo. Felicito a Ángel Agosto, Anamín Santiago, Benjamín Vázquez, y a las y los artistas gráficos, programadores, diseñadores, diagramadores, correctores y quienes trabajan la revista en papel. También a los que mantienen columnas en el formato de revista y en el de periódico diario, como Pedraza Leduc, que dedican tiempo a enriquecer el contenido con sus valiosas aportaciones sobre el movimiento sindical y la lucha obrera nacional e internacional. Gracias a todes por producir un trabajo de calidad y ser el medio para divulgar información útil y de gran valor para la acción política y mantenernos al día a quienes colaboramos provocando debate o, como diría Gramsci, provocando lucha ideológica.

Felicito, además, por haber escogido el medio digital para su producción. La agilidad y flexibilidad del medio permite producir paralelamente un diario obrero y una revista mensual. No solamente es acorde a los tiempos, sino que proyecta las luchas en Puerto Rico al mundo y, a su vez, viabiliza que se rompa el aislamiento histórico que hemos vivido de las luchas de Latinoamérica y el mundo.
La revista Nueva Pensamiento Crítico podría verse como una continuidad de la Pensamiento Crítico cuyo primer número data del 1978, sin embargo, su importancia y significado responde a otra época y otras necesidades políticas. Hoy vivimos un vacío organizativo en cuanto a la voz de la izquierda radical y aunque la revista no pretende ser vocero de una organización en particular, de lo cual me alegro, sí constituye un medio para que el arcoíris de los que buscamos destruir el sistema colonial-capitalista-patriarcal-racista nos podamos expresar. Hoy, cuando el reformismo, los discursos de la izquierda tibia y las propuestas para administrar la colonia, son la orden del día, es necesario que se trabaje por crear conciencia de que existe un horizonte revolucionario no capitalista no colonial.
Con la caída de la Unión Soviética y el llamado bloque socialista, para las décadas de los 80 y 90 del siglo pasado, la izquierda revolucionaria sufrió un gran golpe ideológico. Ha tomado tiempo reponerse y se ha necesitado mucho debate, revisitar mucha teoría, replantearse tácticas de lucha y reenfocar planteamientos en las luchas sociales y políticas. Desde esa perspectiva, en que la certeza ideológica ha dado paso a la incertidumbre, actualmente vigente en todos los ámbitos, la revista juega un papel importante para que los debates no se queden en puertas cerradas, al interior de organizaciones y grupos, ni sean refritos de análisis pasados fundamentados en teorías y escritos que responden a otras revoluciones. La revista y los debates teóricos que ella acoja, deben cobrar amplia divulgación para que llegue a los y las trabajadores y a los sectores, sujetos de cambios sociales, que luchan por sus valiosos reclamos. Sus debates, anclados en la actual realidad nacional, latinoamericana y mundial, deben constituir herramienta sólida para el desarrollo de conciencia de clase para sí, para fomentar la creatividad táctica y una ideología contestataria liberada del euroestadounidensecentrismo y anclada en el Gran Sur, como lo señalaron en su tiempo Mariátegui y Fanon. Fomentar lucha ideológica creadora de epistemología, es decir, de nuevos fundamentos surgidos de la experiencia y el conocimiento acumulado por el arcoíris de sujetos revolucionarios del presente histórico.
Otro elemento importante a destacar, clamando para que permanezca, es la unión de teoría y análisis de las situaciones políticas y económicas de todos los días. A través de los “analistos” que inundan los medios masivos de comunicación, los capitalistas promueven su ideología, confunden y engañan al pueblo trabajador sobre los fundamentos y aspectos esenciales de las medidas neoliberales del gobierno. Como, por ejemplo, han desviado la lucha contra la privatización al debate sobre cuan buena o mala es la empresa o las medidas incluidas en los contratos, en lugar de la privatización en sí. Igual ocurre con el enfoque a la crisis climática y la energía renovable. Los “analistos” proclaman las “dificultades” que implicaría depender de ellas para justificar el uso de gas natural y se le entrega la solución a la empresa privada buscando la instalación de plantas solares en los techos de las casas. Nuevamente se privilegia la salvación individual, religiosa-capitalista, y no se genera apoyo a soluciones colectivas.
No puedo dejar de mencionar y felicitar a Anamín Santiago y al grupo que se le ha unido en hacer de la cultural un eje central de la revista. El trabajo del sector artístico, incluyendo en el término a todas las manifestaciones del arte y el trabajo cultural, siempre ha acompañado la lucha por la independencia y los reclamos sociales de nuestro país. Han contribuido a enriquecer su discurso y presentar diferentes y valiosas perspectivas políticas y estéticas. En este caso que nos ocupa, aportan haciendo visible el teatro, muchas veces invisibilizado. En Puerto Rico tenemos una larga e importante tradición teatral vinculada a las luchas obreras y sociales, no solo del llamado teatro de la alta sociedad. Siguiendo a Ramos Perea podríamos remontarnos a períodos anteriores al siglo XX, pero quiero destacar la experiencia surgida del movimiento sindical en la primera mitad de dicho siglo. Teatro llevado a cabo en piquete, en centrales y huelgas cañeras. En ella se destacaron Ramón Romero Rosa (tipógrafo), Enrique Plaza, José Limón de Arce (cigarrero), Magdaleno González, y la líder obrera y feminista, Luisa Capetillo. Menciono esa experiencia porque empata con el teatro popular y de calle desarrollado durante el período del MPI-PSP y, ya más reciente, durante las últimas huelgas estudiantiles. Creo que sería valioso que la revista incluya como sección un espacio para recoger aportaciones de cuentos y poesía. La literatura y el arte, tan golpeadas en nuestro sistema de educación, debe ser un componente fundamental en la formación del trabajador y no debe dejarse como exclusividad para las elites.
Los sindicatos, los movimientos sociales, la lucha contra la crisis climática, por el reconocimiento de los derechos de la diversidad sexual y por nuestra identidad afrocaribeña, necesitan un medio que les de voz. Los medios de masa capitalistas, incluyendo los del estado, bombardean constantemente con la ideología neoliberal, patriarcal, racista y colonial. La Nueva Pensamiento Crítico tiene que ser la plataforma desde donde se proyecte el discurso antisistema. Esa función pertenece a la izquierda, a las organizaciones obreras y a los sujetos sociales, que conforman la utopía de una sociedad postcapitalista y postcolonial. Esa tarea no es delegable ni a la legislatura ni a los administradores de la colonia. La función de educar sobre el sindicalismo y las luchas del pueblo, así como organizarlas, es tarea ineludible, responsabilidad indelegable de la izquierda y sus organizaciones partidistas. Los sindicatos, las organizaciones comunitarias, feministas, antirracistas, contra la homofobia y la xenofobia, tienen la función de educar y movilizar desde sus perspectivas, no solo para denunciar y reclamarle al estado y a las empresas explotadoras, sino para crear ideología contrahegemónica, desafiar, combatir y confrontar al sistema y al estado que lo representa. La Nueva Pensamiento Crítico tiene que ser el medio portavoz de esas luchas, señalando su carácter anti sistema y proyectando la utopía socialista.
Es necesario crear una nueva visión de mundo, una nueva ética, una nueva estética, en el seno del pueblo. Colaborar en esa tarea es y tiene que ser la función de la revista, en lo teórico y en la lucha de calle. Es necesario que recoja la voz de los activistas de la izquierda radical, de los artistas, de los movimientos sociales. Es necesario el reclutamiento de esas voces y trascender, en contenido y distribución, a la propia izquierda y a la academia, pero siempre manteniendo el discurso de la izquierda radical, sin pretensiones de modificaciones al estado y al sistema, sino movilizando contra ellos, luchando por destruirlos.
Muchas gracias por su atención. ¡Bienvenida a la Nueva Pensamiento Crítico! ¡Abajo el capitalismo colonial patriarcal! ¡Viva Puerto Rico libre y socialista!
Presentación de Luis Pedraza Leduc

Pertinencia de un nuevo pensamiento crítico diario
El movimiento sindical, especialmente el liderato obrero que debe tener la función y el deber de dar dirección a la clase trabajadora, necesita con urgencia una gran dosis de educación y formación política. Sin el conocimiento histórico, sin una formación básica sobre filosofía política y más grave aún, desvinculado de las intuiciones de clase que otorgan las experiencias de la calle, el dirigente sindical está limitado a la administración burocrática del sindicato y en el mejor de los casos a realizar una “razonable negociación de convenio y su mejor administración”.

La realidad de las relaciones obrero patronales en el siglo XXI es que están permeadas por la ideología neoliberal que propone que el mejor sindicato es aquel que no existe. “Lograr una razonable negociación de convenio y su mejor administración” es imposible en este marco neoliberal en el cual empresas y gobierno representan los mismos intereses. El poder económico ha ido eliminando leyes y enmendando otras para reducir a un mínimo toda la legislación que reconoció derechos sindicales y sociales posterior a la Segunda Guerra Mundial en la cual el socialismo resulto con más fuerza y admiración ante una Europa destruida por la guerra.
En ese momento el capitalismo tuvo que ceder, sin dejar de ganar, ante los reclamos de la clase obrera por un mundo mejor, mayor justicia social, libertades e igualdad. La fundación de la Federación Sindical Mundial en el 1945, el fortalecimiento de centrales obreras en diversos países capitalistas o en desarrollo, la creación o fortalecimiento de organismos internacionales en materia de derechos humanos, del trabajo, temas sociales y económicos acompañaron por las próximas décadas un progreso político y social en las sociedades capitalistas frente a los experimentos socialistas en el resto del planeta.
La guerra fría, el debate de ideas, ser de izquierda, centro o derechas definió el campo de acción. Entonces la formación del dirigente sindical y la clase trabajadora era necesaria. Los estudiantes y los intelectuales asumían posición apoyando las luchas obreras.
En el proceso económico y político el capitalismo prevaleció y con ello intento hacer creer a más de uno que las ideas desaparecían. Hoy nos hablan de globalización y utilizan los avances tecnológicos para evitar que pensemos. Tratan de destruir la escuela pública y las universidades. La salvación es individual y lo colectivo es del demonio. Por tanto un gobierno que represente el bien común o un sindicato militante y clasista es cosa del demonio que deben desaparecer.
El nuevo Dios es el mercado, el tan conocido Caballero Don Dinero. Las ideas neoliberales, la forma de vida neoliberal, el estado neoliberal avanza. En Puerto Rico, la combinación colonia-imperio-neoliberalismo ha creado un engendro muy complicado.
Las fuerzas progresistas no necesariamente son de izquierda. Hay quienes aspiran a alianzas despolitizadas, como si tal cosa existiera. Los filtros de información nos crean una burbuja “googolienta” y “facebulesca” para mirar hacia el norte capitalista.
El gobierno colonial electo ha sido sustituido por una Junta imperial que administra una ley suprema y especial para proteger los intereses económicos.
Plantearse en este escenario la salida de un periódico digital diario, con su propuesta de revista, es refrescante, estimulante, correcto y necesario. Su función y aportación principal es comunicar y educar, presentando de manera ágil información que no aparece en los medios tradicionales de comunicación. La tecnología permite llegar a lugares que físicamente o por limitaciones económicas el papel impreso no nos permite llegar.
En este año de existencia el periódico ha dado voz y presencia a quienes buscamos ser oídos y leídos mediante las redes. Nos ha brindado una mirada más allá de nuestra realidad isleña. El debate ideológico, la necesidad de ser solidarios, experiencias de otras luchas de ahora o en la historia, entre otros, son temas recurrentes.
¿Cómo hacer para que los dirigentes sindicales, delegados y trabajadores y trabajadoras, organizados o no reciban el periódico y la revista? Parecería sencillo si tuviéramos las direcciones electrónicas. Pero necesitamos algo más. Necesitamos la discusión pública de lo compartido. Que el pensamiento crítico se haga real en un círculo de estudios, de discusión, de diálogo público.
Se requiere promocionar y propagandizar este proyecto. Hay que visitar a dirigentes y comprometerlos para que apoyen la educación y formación sindical de sus representados. Lograr suscripciones y apoyo económico para mejorar sus presentaciones y recursos tecnológicos. De cara al evento electoral del 2024 el periódico debe promover elevar el debate sobre las elecciones en una colonia-capitalista-neoliberal gobernada por una Junta imperial. Para ello deben lograrse espacios que pueden ir desde plazas públicas, centros de trabajo, asambleas de trabajadores y trabajadoras y universidades, entre otros.
Estamos ante un proyecto informativo y educativo, que usando eficientemente los recursos culturales (entre ellos el teatro, la poesía, la lectura) debe impactar a esos dirigentes obreros, las lideresas obreras, trabajadores y trabajadoras, estudiantes e intelectuales para traducir en organización y acción las respuestas necesarias para detener el proyecto de una sociedad neoliberal convertida en un Puerto Rico sin puertorriqueños.
Luis Pedraza Leduc
11 de febrero de 2023